Esa decisión difícil, ese proyecto largo que requiere horas, ese plan tuyo de mejora que te costará… ¡tienes que hacerlo!
Te da miedo, lo sé.
Pero ganarás mucho dinero si lo haces. Ganarás tiempo, dinero y relaciones.
Si quieres llegar lejos ¡tienes que hacerlo! A todo el mundo le da miedo, tranquilo, no eres único. Pero sí serás único si haces frente a tu miedo y te lanzas.
Sólo el 1% de las personas se atreve con sus miedos, y tu eres de ellos si estás suscrito a este boletín.
Ya sé que tu gran proyecto tu impone. Y ese miedo es tu mayor freno para intentar cosas nuevas.
¿Pero por qué no lo intentas aunque fracases? Cada error te hará mejor y al final solo será cuestión de levantarte y volverlo a intentar.
Nada de renombre se consigue sin errores. Cientos de citas históricas lo dicen con palabras diferentes. Por eso lo único que has te temer es al miedo mismo.
Hoy tienes pendientes un par de cosas nada agradables, pero ganarás más si te lanzas. Y al final dirás "¡No fue para tanto!”
El primer reflejo es posponerlo… pero sólo alargarás la agonía.
Mira, sobrevivimos a los mayores desastres, crisis laborales, divorcios, y no pasa nada. Tememos al juicio de los demás, cuando la realidad es que los demás están tan sumidos en sus propios asuntos que son indiferentes a lo que hagamos. Así que lánzate a tus sueños.
No esquives tus miedos aparcando tus metas. ¿Para qué sobrevivir míseramente? Temes las situaciones personales incómodas, pero más vale ponerte una vez rojo que ciento amarillo.
E insisto, al final nunca es para tanto: esa llamada que parecía tan difícil, se convierten en nada cuando la empiezas. Y das un paso de gigante. Ganas de calle a la mayoría que no mira de frente al miedo y pospone eternamente. Y cuando ellos se quejen, tú sabrás por qué.
Te pagan para solucionar problemas… sino no tendrías trabajo. Pues lánzate a los problemas sin que te lo pidan y ganarás mucho más.
Tu primer paso es saber que todo es una sucesión de problemas, de que tu estás ahí para solucionarlos.
Los obstáculos no desaparecen, están ahí para ponerte a prueba. Sino cualquiera conseguiría todo sin esfuerzo. ¿Cómo quieres que te distingan del resto sino? Es sólo una prueba para saber si vales. Los problemas son pruebas. Agradécelos porque detrás solo hay éxito.
Si no te enfrentas al problema que ahora te ronda en la cabeza, al de unos meses seguirá ahí. Tu estrés será mayor y tendrás que completarlo igualmente… con la desventaja de estar fuera de plazo.
¿Qué tienes pendiente y ocultas sistemáticamente? ¿Pospones el cara a cara? ¿Pospones tres horas seguidas sin levantarte para terminar ese proyecto?
Lánzate y lo tendrás.
Para que rompas la barrera del miedo,
David
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