¿Tienes una gran
deseo?
Porque si quieres
llegar lejos necesitas un deseo.
¡Tienes que desear
algo con todas tus fuerzas!
El punto de partida
para despegar a tu sueño es un deseo brutal.
Y luego hacer algo
al respecto…
Porque es mentira lo
que dicen por ahí que lo importante es visualizar y ser positivo. Pero son
teorías sin sentido para que algunos autoproclamados gurús vendan su
producto. “Que fácil, yo también quiero…”
El viejo timo de
prometerte el mundo a cambio de un céntimo.
Porque el deseo por
si mismo es sólo una sensación. No tiene valor si no actúas.
Haz hoy que te
acerque a tu gran objetivo. Una llamada, un minuto de ejercicio, veinte
segundos más de concentración…
Eso funciona para
ponerte en la pista rápida.
Persigue algo con
fogosidad y no aceptes un no por respuesta. Así tendrás éxito.
E insisto: vale algo
pequeño para lograr tu propósito.
¿Te acuerdas cuando
de pequeño cuando insistías a tus padres para que te llevaran al parque? ¿O
cuando te volcabas para hacer ese viaje de verano con tus amigos? ¿O para ir
a aquella fiesta? Pues da el primer paso de desear algo y luego ponte en
marcha.
Porque es bueno
tener sueños. Tirarán de ti cuando los demás se rindan.
Con un deseo
poderoso que no te quepa en el cuerpo tendrás una energía de otro mundo.
Con esa fuerza
superarás cualquier decepción, cualquier fracaso temporal y cualquier
crítica.
Así que deja de
perder tiempo. Desea y actúa.
Confía en ti mismo.
Sólo TÚ te puedes ayudar.
No busques en los
demás. Aunque te quieran. Al final actuar está en tu mano, ellos no pueden
moverte.
Lo vas a lograr.
Créetelo.
Tienes un poder
escondido que no imaginas.
Pero actúa ya.
Haz algo hoy mismo.
Hoy empieza tu camino al éxito. Tu nueva confianza eliminará cualquier
obstáculo.
Escucha tu voz
interior, la que te dice quién eres y lo que quieres y da un pequeño paso.
Hoy.
Para que llegues
lejos,
David
|
viernes, 29 de abril de 2016
Esto es lo que puede cambiar tu Vida
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario